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Cambiar de carrera universitaria no debe ser algo que genere
estrés para ti. Si no te sientes
conforme con la carrera que elegiste y crees que rendirás mejor en otra, cámbiate,
piensa que a eso te dedicarás por el resto de tu vida
Existen personas que encuentran su vocación desde muy
temprana edad, pero hay otras que necesitan pasar por diferentes carreras hasta
hallar su profesión soñada. Cuando se toman decisiones tan importantes como lo es
elegir lo que harás para el resto de tu vida
a los 17 años, las equivocaciones son muy frecuentes.
Los motivos por lo que esto sucede son infinitos, pero lo
importantes es detectarlo y tomar cartas en el asunto, ya que siempre estamos a
tiempo de empezar de nuevo. Existen varios
consejos que debes leer para entender que cambiar de carrera no es el fin del
mundo.
1.
El tiempo que duraste en otra carrera no lo
perdiste
Es normal que pienses que has perdido un tiempo valioso en
otra carrera, pero la verdad no es así, ya que todo conocimiento que se pueda aprender
será beneficioso en algunos momentos de la vida. Además, a la misma vez se obtienen grandes
experiencias y madurez.
2.
“Haz lo que amas y no tendrás que trabajar”
Aunque suene un poco cliché, esta frase reúne la importancia
de estudiar lo que de verdad te gusta. Después de graduarte tendrás que ganarte
la vida y si lo haces trabajando en algo que no te causa satisfacción, será una
larga tortura. En cambio, si lo que harás para el resto de tu vida es algo que
te llena de gozo, definitivamente vale la pena intentarlo.
3.
Crecimiento en el plano profesional
Inevitablemente las personas estudian durante toda su vida
ya que en algún momento de la carrera laboral, habrá actualizaciones que se
deben hacer para no quedarse estancados y ascender profesionalmente. Si te gradúas en algo que no te gusta y
quieres ser ascendido, esto seguirá siendo un tormento para ti, o simplemente
nunca podrás avanzar ya que no pasarás de nuevo por el martirio de estudiar.
4.
Tus notas serán excelentes
Lo más probable es que las notas que tengas en una carrera
que no te guste no sean para sentirse orgulloso, pues estudiar es una labor muy
tediosa para ti. En cambio, si te dedicas a hacer algo que te llene de
entusiasmo, las materias y asignaciones se te harán interesantes, por lo tanto
no estudiarás sólo por pasar un examen, sino para aprender, dando como
resultado buenas calificaciones.
5.
No sentirás estrés ni frustraciones
Las preocupaciones que puedas sentir en el momento de decidir
si cambiar de carrera o no, serán mínimas al lado de hacer lo que no te gusta
por el resto de tu vida. Quizás estas
preocupado por perder al grupo de amigos que hiciste durante la carrera
equivocada, pero debes pensar que ellos no son los que van a trabajar por ti en
el futuro y no necesariamente dejarás de
verlos, ya que existen otros ámbitos en el que puedan frecuentar. Visualízate en el día de mañana, piensa qué
tipo de persona quieres ser, anímate a hacer un cambio y empieza a estudiar lo
que realmente te gusta.
Por: Cruz Maiz
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