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Optar
por una vida sana no es tarea fácil para muchos, ya que jóvenes, niños y hasta
adultos prefieren las famosas comidas rápidas sin darse cuenta en muchos casos
del gran daño que estas ocasionan.
Cortesía:
Marianny
Mariño
Niurka Ramírez especialista en medicina
interna indicó que en la sociedad los mayores consumidores de comidas chatarras
como las hamburguesas, los perros calientes, los pepitos, entre otras son los
jóvenes, debido a que se la pasan en fiestas, trabajando, estudiando u otras
actividades y no comen saludable.
La buena rutina alimentaria comienza desde el
hogar, aseguró la especialista en salud, Migdalia Morris. Afirma que la
diabetes es una amenaza crónica que se desencadena cuando el organismo pierde
su capacidad de producir suficiente insulina.
Morris indicó que el paciente diabético debe
llevar una dieta constante, y no es dejar de comer. “Muchas personas piensan
que dejando de almorzar o cenar van a disminuir su peso y no es así, es saber nutrirse.
Se puede ingerir mucho pero sano, no es recomendable el exceso de frutas porque
hacen que la glicemia se eleve”.
José Gago, licenciado en gestión social del
centro Dra. Lya de Caronil informó que es una enfermedad que puede cambiar
rotundamente la vida de personas. Como consecuencia afecta el carácter, los
ánimos, entre otras partes del cuerpo las cuales se ven afectadas como lo es la
vista, problemas circulatorios, daños en el sistema nervioso entre otros.
Destacó que las personas afectadas deben
llevar esta situación en familia. Todos
están en el deber de comer lo mismo que el paciente para que éste pueda
sentirse querido y no rechazado por el padecimiento que lo asecha y así cumpla
con todos los planteamientos dados por los especialistas en el tema.
Comer dulces delante de ellos los afecta en
gran manera y los pone de mal humor. “Los afectados comienzan alejarse de la
sociedad y vienen en un mundo depresivo, ya no comparten igual que antes y se
sienten hasta menos por no poder hacer lo que hacen los demás” comentó Gago.
La especialista Rodríguez advirtió que
existen dos tipos de diabetes la tipo 1 en la que las personas suelen padecer
de sed continua, pérdida de peso, fatiga constante, necesidad de orinar
continuamente entre otras y la tipo 2 fatiga, capacidad física reducida, ansia
por comer a cada rato, sudoración, dolores de cabeza, pérdida de peso entre
otras.
Por lo cual recomendó un mayor cuidado a la
hora de ingerir alimentos y evitar las balas frías porque tiene un efecto
negativo a largo plazo. Instó a que todo individuo debe asistir de vez en
cuando al médico y tener un constante control sobre la glicemia.
Morris concluyó diciendo que mantener un peso
adecuado, realizar ejercicios, comer balanceado menos grasa, dulces, realizar
una prueba llamada glicemia por lo menos cada tres meses ayuda a tener una vida
sin diabetes.
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