Por: Jesús Salazar
En Venezuela, destacados doctores se han dedicado a la
investigación científica para que a través de sus estudios las autoridades de
sanidad sirvan como instrumento para evitar posibles epidemias.
En la Universidad de Oriente (UDO), núcleo Barcelona, el profesor
e investigador, Antonio Morocoima, es
catalogado como una joya en el ámbito científico por su perseverante estudio al
Chipo (animal causante de la enfermedad del mal de Chagas.)
Morocoima es magister en parasitología (UCV) y tiene
12 años dirigiendo El Centro de
Medicina Tropical de la UDO- Anzoátegui.
A través del Centro de Medicina Tropical ha
emprendido un sinfín de investigaciones, en las cuales ha logrado detectar nuevas especies
de Chipos. “Regularmente realizo trabajo de campo en horas de la noche. Junto a
mi equipo visitamos zonas rurales e incluso el terreno de la UDO para capturar
Chipos y posteriormente estudiarlos”, dijo el especialista.
El investigador científico
cuenta con gracia, que en oportunidades ha dejado que los Chipos, previamente examinandos,
se alimenten con su sangre para sentir el efecto que genera la picada del
insecto en el cuerpo humano.
Para la estudiante de
medicina, Odina Rojas, quien cursó la materia de Parasitología con el doctor
Antonio Morocoima, el profesor cumple una labor importante en la UDO, ya que les
aporta a los futuros médicos muchos conocimientos acerca de los insectos que
transmiten enfermedades.
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