Trabajar y estudiar era una opción
para muchos, antes alcanzaba para poder pagar una habitación y hacer un mercado
para aquellos jóvenes que decidieron salir de sus hogares a probar suerte en
otros estados del país.
La Universidad Santa María, alberga a
casi cinco mil estudiantes en sus diferentes edades y carreras, entre ellos
existen muchos de las zonas aledañas del estado como El Tigre, Anaco, Puerto
Píritu, San Mateo, Cumaná, quienes decidieron irse de sus casas hacía otra ciudad
para encontrar la carrera de su conveniencia.
En una encuesta realizada en los
pasillos del núcleo universitario dimos con 20 estudiantes foráneos de los
cuales 16 tienen la doble tarea de estudiar de noche y de día trabajar, para
ayudar en los costos de la matrícula.
“16.399,00 Bolívares no me alcanzan ni
para pagar una cuota de la universidad, la realidad del país es otra. Mis
padres me ayudan con los gastos aquí en Puerto La Cruz aparte pago adicional
una habitación en la urbanización Pascal II sin meter que tengo que comprar mis
artículos personales y el mercado para el mes” comentó María Peña, estudiante
del octavo semestre de Ingeniería Civil.
Pese a la crisis económica que
atraviesa Venezuela, la que se ha agudizado en los últimos seis meses, los
precios de los alquileres de apartamentos, el precio de la canasta básica va en
incremento cada día se ha vuelto el dolor de cabeza de muchos.
“Yo hasta he pensado en regresar a
Cumaná y estudiar para Técnico Superior Universitario, pero las ganas de superarme cada día y de que ya
estoy cerca de la meta que me plantee desde el inicio me han mantenido firme,
seguiré luchando por mi futuro y mi país” acotó la joven de 22 años.
La Santa María se ha caracterizado
por ofrecer horarios flexibles a sus estudiantes, lo que hace que cada uno de
ellos pueda crecer por ambos ámbitos a lo largo de su carrera
profesional.
María Alexandra Gómez.
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